En Colombia vale más un pedazo de tierra que la vida de quienes lo habitan. Desde la ciudad el conflicto se ve ajeno. El humo no nos deja ver los cadáveres y la distancia nos aleja del dolor de las víctimas. Juan Miguel Álvarez ha viajado por toda Colombia con la misión de develar historias de profundo dolor y también de reconcilación. Federico Ríos lo acompañó para registrar las imágenes de esta aventura a veces dura y a veces esperanzadora.