El vino y el hachi´s, como medios para estimular la creatividad del poeta, lla- maron la atencio´n de Charles Baudelaire, que en este texto, basa´ndose en su ex- periencia personal, analiza sus efectos respectivos y los compara.
Charles Baudelaire (1821-1867), el gran poeta que inicio´ los caminos que iba a seguir la poesi´a moderna, vivio´ en Pari´s una vida bohemia, dorada durante un tiempo y finalmente precaria. En ese mundo de escritores, artistas y mu´sicos era corriente, como es bien sabido, el abuso del alcohol y tambie´n el uso del hachi´s, droga exo´ti- ca por aquel entonces. En este ce´lebre texto que presentamos, Baudelaire analiza los efectos que dichas sustancias producen en el alma humana y, ma´s particularmente, en el alma del poeta, efectos contradictorios que van de la euforia a la depresio´n, de la lucidez al aturdimiento, y que permiten al poeta emitir su juicio sobre ellas: el vino hace que el que lo bebe sea bueno y sociable, mientras que el hachi´s es condenado por antisocial, juicio que refleja las preocupaciones sociales de las que se hizo eco el poeta durante un breve peri´odo de su vida.