Este cuento narra el seguimiento que el inspector Molina le está dando a El Pintor, un asesino en serie que se caracteriza por pintar de azul los cadáveres de sus víctimas, para luego retratarlas en cuadros. La técnica del sfumato y la similitud con el estilo de uno de los pintores más importantes del mundo le darán a Molina pistas para desentrañar este misterio.