No hace tanto tiempo, Eragon no era más que un pobre muchacho que vivía en una granja y su dragona, Saphira, una piedra azul oculta en el bosque. Ahora, el destino de una civilización recae sobre sus hombros.
Los largos meses de entrenamiento y batallas les han traído victorias y esperanza, pero también pérdidas terribles. Sin embargo, la verdadera batalla aún no ha llegado: deberán enfrentarse a Galbatorix. Ycuando finalmente lo hagan, tendrán que ser lo suficientemente fuertes como para vencerle porque si ellos no lo hacen, nadie podrá.
No habrá una segunda oportunidad.