Habiendo pasado cinco años cautivo en un castillo francés, Fernando VII regresó a España en 1814. Tras abolir la Constitución, disolver las Cortes y dar por nulo todo lo obrado por ellas, el monarca despachó una poderosa expedición a América con el objeto de poner punto final a los procesos revolucionarios del continente. Al mando de Pablo Morillo, el llamado Ejército Pacificador sitió exitósamente a Cartagena a finales de 1815 y aniquiló posteriormente la revolución en la totalidad del Nuevo Reino. A pesar del rápido desplome de las Provincias Unidas, el régimen se derrumbó a su vez al cabo de tres años. ¿Cómo explicar semejante desenlace?