Dos muchachas punks, Mao y Lenin, son las magníficas, terroríficas y tal vez trágicas heroínas de este fascinante relato incendiario. Las novelas de Aira son textos concentradísimos y libérrimos que en pocas páginas cuentan una historia, describen un ambiente, crean personajes, pero además trastornan todos los supuestos y forjan una realidad nueva y aparte. Marcia, una muchacha de dieciséis años, muy lista y también muy sensata, atraviesa a la salida de la escuela una plaza que es lugar habitual de reunión de los punks de la ciudad y escucha de una de las muchachas, Mao, las dos primeras palabras de esta novela: ¿Querés coger? Cuando Marcia le pregunta que si está loca, la otra le explica que no lo está, sino que se ha enamorado de ella con sólo verla. Junto con otra punk, se van a platicar, discuten sobre qué es ser punk, sobre el amor, sobre el mundo y su irrealidad. De pronto sin apenas darse cuenta cómo, el lector está de lleno en el territorio de Aira, donde todo da vuelta, enloquece, se violenta, se dispara, abandona toda verosimilitud y entra en una lógica salvaje. Las dos punks salen a la calle y se lanzan a la prueba de amor de Mao por Marcia, con un saldo más bien rojo y toda suerte de daños en propiedad ajena. He aquí una versión de la adolescencia vista por Aira como incendio del mundo, en este relato espléndido, veloz e inteligentísimo.