Narrar la historia de un objeto cotidiano, de sus técnicas, de sus formas, de sus usos: tal es la primera ambición de este libro. El autor quisiera que en él se viera una minuciosa historia de los objetos de medición del tiempo, desde el primer gnomon hasta los objetos más extraños de hoy. Una historia, asimismo, de sus teóricos, de sus inventores, de sus fabricantes. Y, por encima, la de lo usos, inocentes o perversos, cotidianos o desmesurados, que les han dado los hombres. En cada encrucijada de la historia del poder cambia la medida del tiempo: señal anunciadora. El reloj de sol, el de arena, el reloj astronómico o el de pulsera, el cronómetro revelan algunas de esas grandes fracturas. Y también hoy, el porvenir, sus riquezas o sus ruinas son inseparables del uso que se dará al tiempo.En cada encrucijada de la historia del poder cambia la medida del tiempo: señal anunciadora. El reloj de sol, el de arena, el reloj astronómico o el de pulsera, el cronómetro revelan algunas de esas grandes fracturas. Y también hoy, el porvenir, sus riquezas o sus ruinas son inseparables del uso que se dará al tiempo.