Rubem Fonseca, máximo representante del realismo visceral, es dueño de una prosa violenta, mordaz y divertida que no teme llamar a las cosas por su nombre.
Tanto así que en 1977 sufrió la censura del régimen brasileño: 36 mil copias de sus libros fueron confiscadas bajo el argumento de que "retrata en su casi totalidad personajes cargados de complejos, vicios y taras, con el propósito de ilustrar una cara oscura de la sociedad, basada en la delincuencia, el soborno, el latrocinio...", según explicaba el documento elaborado por el Ministerio de Justicia.
Fonseca respondió, ganó el litigio contra el Estado y hoy sus libros forman parte del canon literario internacional.
Este segundo volumen de los CUENTOS COMPLETOS incluye los títulos: Novela negra y otras historias, El agujero en la pared, Historias de amor, Del fondo del mundo prostituto sólo amores guardé para mi puro y La Cofradía de los Espadas.