Lainquietante personalidad de Jean Arthur Rimbaund (1854 - 1891) ya entródesde hace muchos años, y definitivamente, en la categoríade los mitos. Su figura adolescente se vuelca desde el fondo de los tiemposcontra nosotros, injuriándonos, crispado por la cólera quese revuelve en su espíritu, ofreciéndonos una imagen únicade lo que el autor comprende como literatura. A los diecinueve añoscambia su obra rebelde, revolucionaria y vidente por una vida aventurera.Es cuando deja de escribir, pero ya entonces era el autor que máscaminos había encontrado para su expresión. Como diríaPaul Claudel, Una temporada en el Infierno es la obra de un místicoen estado salvaje.