Luego de su publicación original en 1998, Más brillante que el sol, del ensayista y artista británico Kodwo Eshun, marcó un antes y un después en la crítica musical y los estudios culturales. Parte experimento de escritura ciberpunk, parte viaje a través de las capas subterráneas de la música negra, este libro se propone abandonar el abordaje clásico que explica las innovaciones sonoras por lo social, lo histórico o lo biográfico para adentrarse de lleno en la materialidad del vinilo y descubrir los conceptos que la música produce para teorizarse a sí misma. A partir de un ajuste constante del telescopio de la percepción, desde la escucha más atenta de los samples de un track hasta la contemplación fascinada ante el arte de tapa de un disco, este libro está diseñado para producir sensaciones en tu cuerpo, como cuando tus dedos se sienten atraídos por un disco y se estiran para alcanzarlo, o cuando un ritmo se mete bajo tu piel provocándote un estremecimiento eléctrico. Porque el cuerpo es la vía de acceso definitiva para comprender la música. Desde Sun Ra y Alice Coltrane a Lee Perry y Tricky, desde Public Enemy y Funkadelic a Underground Resistance y Drexciya, lo que persiste no es una noción de lo negro como algo puro y unificado, con raíces en el pasado o en la autenticidad de la calle. Surgida de la experiencia de la diáspora, la esclavitud y el desarraigo, la cultura afroamericana y los sonidos afrofuturistas del jazz, el funk, el dub, el hip hop, el techno y el jungle son por definición sintéticos, alienígenas y posthumanos. A partir de un tipo de imaginación nutrida por los cómics y la ciencia ficción, Kodwo Eshun encuentra en esa música indicios de nuevas formas de vida: shocks sensoriales que nos arrojan hacia mundos que vienen a nosotros desde el futuro.