Sabemos que el dolor que comenzó en la infancia es permanente, que hará parte de nuestra vida siempre y que nos acompañará hasta la muerte. Pero, ¿hay alguna forma de hacerle frente? La joven protagonista de esta historia, instada por un escritor que sin proponérselo se convierte en su mentor, y armada de su escritura y un cuaderno rojo, decide enfrentar su historia. Para entender lo que pasó, que no es la tragedia misma sino lo que de ella se derivó, debe enfrentar la llamada de su padre. Decide primero conocer su infancia para comprender por qué fue él el primero que ante la adversidad decidió alejarse.
Una conmovedora historia que nos lleva de la mano al corazón de una tragedia familiar, arropados por el poder sanador de la literatura.