Casement fue uno de los primeros europeos en denunciar los horrores del
colonialismo. De sus viajes al Congo Belga y a la Amazonía sudamericana
quedaron dos informes memorables que conmocionaron a la sociedad de su
tiempo. Estos dos viajes y lo que allí vio cambiarían a Casement para
siempre, haciéndole emprender otra travesía, en este caso intelectual y
cívica, tanto o más devastadora. La que lo llevó a enfrentarse a una
Inglaterra a la que admiraba y a militar activamente en la causa del
nacionalismo irlandés.
También en la intimidad, Roger Casement fue un personaje múltiple: la
publicación de fragmentos de unos diarios, de veracidad dudosa, en los
últimos días de su vida, airearon unas escabrosas aventuras sexuales que
le valieron el desprecio de muchos compatriotas.
El sueño del celta (2010) describe una aventura existencial, en la que
la oscuridad del alma humana aparece en su estado más puro y, por tanto,
más enfangado.
La crítica ha dicho...
«El sueño del celta reúne algunas de las mejores virtudes del escritor y
se integra, además, en la estela de motivos temáticos fundamentales
reiterados a lo largo de su obra.»
Ricardo Senabre, El Cultural
«Vargas Llosa no tiene rival: en El sueño del celta la tarea de lectura
y documentación previa es ingente, descomunal y titánica. Pero jamás
abruma al lector. He aquí el primer mérito de esta novela: contar una
historia como si todo fuera verdad escondiendo la mentira. El segundo
mérito estriba en el dominio absoluto y constante del creador sobre su
criatura. Ha escrito novelas más complejas técnicamente, pero la
estructura de esta queda perfectamente encajada en lo que el novelista
se ha propuesto... Con un dominio absoluto de la novela, que empieza en
1903 y acaba en una cárcel de Londres en 1916, demuestra por qué la
Academia sueca lo premió con el Nobel.»
Ricardo Baixeras, El Periódico
«El sueño del celta dibuja, con los recursos de la ficción, los
despiadados entresijos del poder y la fuerza de la individualidad... La
novela avanza envolvente, a ritmo impecable, y nos sumerge en una
crónica sobrecogedora del despotismo, con unos personajes tan enraizados
en su doliente y contradictoria humanidad que hacen de esta novela un
gran regalo literario.»
C. Méndez, Expansión
«Una novela que aspira a abarcar todo el inabarcable espacio de la vida
de un hombre... Con esa manera de contar de Vargas Llosa que emboba,
arrastra, hipnotiza y demuestra una vez más que, en efecto, la muerte lo
encontrará escribiendo, pues, pasados los 70 años, escribir un prodigio
como El sueño del celta mueve a envidia, admiración ilimitada y aplauso
cerrado.»
Francisco García Pérez, Información
«De nuevo en el mundo ficticio de Vargas Llosa se revela en toda su
crudeza la verdad de las mentiras. Innecesarios los elogios.»
Juan A. Masoliver Ródenas, La Vanguardia (Cultura/s)