Cuando Pessoa contaba 25 años, ideó un proyecto que trataría de reunir siete obras de teatro estático. De ellas, la única que concluyó fue El marinero, que se publicaría en la revista modernista Orpheu y que editamos ahora en castellano con ilustraciones de Ignacio Lobera.El marinero, a pesar de no haber recibido durante muchos años más atención que sus obras poéticas, contiene toda una declaración de intenciones. Aunque con una estructura mínima y un lenguaje preciso, está cargada de pasión y tragedia. Es una obra perturbadora, misteriosa y lúcida que nos introduce en el gran universo pessoano.