Este libro tiene dos partes:
La primera parte, «El arte de la ficción», en la que Woolf plantea la literatura como un camino, como un sendero, en que quienes leen se cruzan con géneros de toda índole; vuelven a visitar aquellos títulos leídos antaño. Leer y escribir para Virginia Woolf es dar pasos hacia el pensamiento crítico, la independencia intelectual y la posterior libertad de la mujer.
En la segunda parte, «El arte de la biografía», emprende su propio camino como escritora, donde no solo aborda cuestiones de la tradición literaria inglesa, sino que trata la irrupción de las literaturas francesas, rusas, irlandesas y estadounidenses en el panorama editorial inglés. Celebérrimas plumas literarias de Inglaterra se ilustran con palabras en pequeñas biografías que combinan la veracidad de los hechos su obra literaria y su pensamiento crítico con la verosimilitud de las anécdotas el testimonio de terceras personas.