En esta conmovedora y oportuna historia, una niña pequeña describe lo que es ser un migrante mientras ella y su padre viajan hacia el norte hacia la frontera de los Estados Unidos. Viajan principalmente en el techo de un tren conocido como La Bestia, pero la niña no sabe adónde van. Cuenta los animales por el camino, las nubes en el cielo, las estrellas. A veces ve soldados. Duerme, soñando que siempre está en movimiento, aunque a veces se ven obligadas a detenerse y su padre tiene que ganar más dinero antes de que puedan continuar su viaje. Dado que miles de personas, especialmente niños, en México y Centroamérica continúan haciendo el arduo viaje hacia la frontera de Estados Unidos en busca de una vida mejor, este es un libro importante que muestra la perspectiva de un joven migrante. Ilustrado por Rafael Yockteng