Introducción de Juan Luis Suárez Granda.
Cuatro siglos bien largos después de haber aparecido la primera edición italiana (Venecia, 1570), ve la luz en español la obra de Bartolomeo Scappi, Del arte de cocinar, uno de los grandes monumentos de la cocina occidental, comparable sin ninguna duda a la obra de los más grandes, los Apicio, Taillevent, Maestro Martino, Ruperto de Nola, Savarin, Caríªme o Escoffier. Scappi es a la historia de la cocina lo que Miguel íngel a la del arte. Si Italia es la cuna de las artes plásticas y el humanismo renacentista, lo es también de la cocina moderna, la que sucedió a las viejas y contundentes ollas o pantagruélicos asados medievales, el punto de inflexión entre dos épocas, en definitiva. La cocina del país toscano gozaba en esa época de la supremacía en toda Europa y es entonces cuando Bartolomeo Scappi, cocinero privado del papa Pío V, publica Del arte de cocinar, ilustrado con numerosos y bellísimos grabados, conocido como la Biblia de la cocina renacentista. Este monumental tratado teórico-práctico contiene las normas de servicio y presentación de las mesas palaciegas y cónclaves cardenalicios, los principios generales del arte culinario y una completa colección de no menos de 800 recetas clasificadas por apartados: las carnes, los pescados, la pasta, la repostería y la cocina para enfermos. Una cuidadísima traducción al español, junto con una amplia introducción a este histórico tratado culinario (de gran interés son las recetas formuladas por Scappi que pasaron a la cocina española) y un glosario de términos empleados, ponen a disposición del lector español, a lo largo de casi 800 páginas, una obra vertebral de la cocina europea.
Incluye las ilustraciones originales.