Una historia familiar enternecedora.
Normalmente vivo sola con mis dos hijos. Mi marido trabaja fuera y no puede regresar a casa muy a menudo. Se lleva bien con nuestros hijos, pero a veces tienen sus diferencias. Él no tiene ni idea de que nuestro hijo mayor, Hiroki, quizá sea gay, y hace ciertos comentarios sin cuidado. Sin embargo, estoy segura de que ama a nuestros hijos y no tiene intención de hacerles daño. Algún día, espero que ambos sean capaces de entenderse.