UNGAR, ANTONIO / GUEVARA, SANTIAGO
Un niño busca en vano la respuesta a una pregunta que le ronda la cabeza. Mientras tanto, cada día ordena en fila las letras de las sopas, antes de comérselas, y se entretiene mirando las calcomanías de estrellas pegadas en perfectas filas en el techo de su cuarto. Pero, un día cualquiera la pregunta se disuelve por qué llega la risa sin avisar y se mete dentro de el con la potencia del rugido de un león.