El Pakhan de la Bratva Un hombre puede ser feliz con cualquier mujer mientas no la ame. La frase celebre de Wilde se adhería a mi piel, quise a una mujer y por ello me condené. Es mi enemigo por naturaleza, es un sucio perro maldito italiano, il Capi di titti capi. Yo, el nuestro Pakhan de la Bratva en Chicago. Estaba dispuesto a quebrar a la mafia italiana desde dentro por Emilie Greystone, pero las cosas pueden cambiar, ¿no? Lo hicieron, mi ojos se posaron en otros, mi cuerpo ardió al mirarla. Y esta vez no pienso correr ningún riesgo. Si Chicago debe ser reducido a cenizas para tenerla, estoy dispuesto a dejar un camino de sangre y destrucción detrás. En el Pasado perdí todo, pero en el presente conocerán al verdadero monstruo en mi interior. Mis días ahora se encuentran llenos de sangre. Los hombres me meten, las mujeres se estremecen. El mundo se inclina, mientras la oscuridad se adueña de mi alma. Color de páginas negras.